
- Actualiza y sustituye al actual documento que establece entre otras, las especificaciones relativas a la aplicación de los requisitos mínimos de eficiencia energética de los edificios.
Desde el pasado 24 de septiembre, está en vigor de forma obligatoria las modificaciones del CTE. El plazo de 6 meses de aplicación voluntaria del Real Decreto 732/ 2019, cuya fecha de finalización original era el 27 de junio de 2020, finalizó el 23 de septiembre de 2020 debido al COVID, siendo obligatoria la aplicación del citado Real Decreto para todas aquellas obras que soliciten licencia municipal a partir del 24 de septiembre de 2020.
Esta nueva versión, supone un avance hacia la consecución de soluciones energéticamente eficientes y sostenibles, que permita abordar las implicaciones que para el sector de la construcción tendrá la adopción de la Directiva relativa a la eficiencia energética de los edificios. Bajo esta norma, los Estados Miembros deberán tomar las medidas necesarias para garantizar que se establezcan unos requisitos mínimos de eficiencia energética, de tal forma que todos los edificios construidos en Europa deberán de ser de consumo de energía casi nulo.
La entrada en vigor del nuevo CTE será efectiva a los 6 meses de la publicación anteriormente indicada y las modificaciones afectan básicamente a los siguientes tres documentos: El documento básico DB-HS de salubridad, donde se introduce una nueva exigencia básica HS 6, de protección frente al gas radón, el documento básico DB-SI de seguridad en caso de incendio, donde se introducen modificaciones relativas a la clase de reacción al fuego de los sistemas y materiales para limitar adecuadamente el riesgo de propagación del incendio por el exterior del edificio y el documento básico DB-HE de ahorro de energía, donde se modifican las exigencias de eficiencia energética.
El Documento Básico DB HE de Ahorro de energía del Código Técnico de la Edificación que mediante este Real Decreto se actualiza incluye todo tipo de edificios, tanto los de uso residencial privado (viviendas) como los de uso terciario. Asimismo, es de aplicación tanto a edificios de nueva construcción como a aquellas intervenciones que se realicen en edificios existentes (ampliaciones, reformas o cambios de uso).
Algunos cambios que se incluyen en este nuevo documento son:
- Definición de un nuevo sistema de indicadores: se mantiene el indicador de Consumo de energía primaria no renovable y se definen nuevos indicadores como el consumo de energía primaria total, el coeficiente global de transmisión de calor a través de la envolvente, el Control solar de la envolvente térmica y la permeabilidad al aire.

- La propuesta de modificación supone reducciones nominales de consumo de energía primaria no renovable para edificios de vivienda plurifamiliares (en bloque) de en torno al 38%, llegando en el caso de edificios unifamiliares hasta el 60% en las zonas más adversas en régimen de invierno.
- En cuanto al uso de energía procedente de fuentes renovables se plantea un aporte del 50% del consumo de energía primaria en la situación límite de consumo de energía primaria total.
- Exigencias de aislamiento para los casos de rehabilitación superiores a las actuales
- Se mantiene la obligación de utilizar un cierto porcentaje de energía renovable para cubrir las necesidades de ACS (sección HE 4), y también la de generación de energía eléctrica mediante paneles solares fotovoltaicos y otros procedimientos, en edificios de uso terciario (sección HE 5). Se elimina, no obstante, la referencia específica a tecnologías concretas, como la solar térmica o la solar fotovoltaica.
- Se introduce una nueva exigencia básica de salubridad HS 6 de protección frente al gas radón como resultado de la Directiva 2013/59/EURATOM del Consejo, por la que se establecen normas de seguridad básicas para la protección contra los peligros derivados de la exposición a radiaciones ionizantes.
ISOVER dispone de la más amplia gama de productos de aislamiento del mercado, adecuados eficazmente a los nuevos requisitos y dispone de una amplia red de expertos técnicos para asesorar a los agentes implicados en el proceso de edificación sobre las implicaciones de las nuevas exigencias.